«Cabildo Abierto» de la Fundación Chadileuvú EN DEFENSA DEL COLORADO

b_300_200_16777215_0_0_images_2019_gomez-19.jpgLa Fundación Chadileuvú se encuentra preparando un «Cabildo abierto en defensa del río Colorado» para concientizar a la población sobre la importancia de ese recurso estratégico y los peligros que lo acechan. La intención es convocar a todos las personas involucradas tanto en su gestión como en su aprovechamiento.
«Hemos hablado con mucha gente usuaria del río, incluso acá de Santa Rosa, y creemos que la defensa del río nos compete a todos, tanto aquellos que cultivan la tierra como a quienes usan el agua para bebida o para otros usos», explicó el Ing. Héctor Gómez, presidente de la Fundación Chadileuvú . «Lo que está en juego acá es la salud del río y el río Colorado mismo», advirtió.

La intención es convocar a autoridades municipales, provinciales e institucionales. El cabildo aún no tiene fecha pero la Fundación ya comenzó a mantener reuniones previas con los potenciales participantes.
El río Colorado actual, explicó Gómez, «no es el río de hace 20 años» desde el momento que su módulo histórico de 147 metros cúbicos por segundo se ha reducido en los últimos años a unos 90 metros cúbicos por segundo. Esta bajante no solo disminuye la disponibilidad de agua sino que afecta sus condiciones y calidad.
Junto con el escenario natural «está el problema de las acechanzas y concretamente nos referimos a Portezuelo del Viento», especificó Gómez en referencia a la represa que Mendoza quiere construir sobre el río Grande. «Es un tema gravísimo para nosotros», remarcó.


Lo que quiere hacer Mendoza es «una represa con la excusa de generar energía, y digo excusa porque está determinado efectivamente que están mintiendo» ya que la energía que podrá generar «será un tercio de lo que ellos dicen», explicó.
En realidad, la excusa de generar energía es para construir «el dique más alto de la Argentina» y de esa manera «tener la altura del agua suficiente para facilitar el futuro trasvase» de aguas desde el río Grande al río Atuel, que corresponde a otra cuenca hídrica. «Conocemos la historia de Mendoza respecto a los ríos. Es una historia favorable para ellos y negra para el resto, en este caso La Pampa», reflexionó el dirigente.
«El comportamiento argentino en los ríos compartidos con otros países, con errores y aciertos, es a través de acuerdos», analizó Gómez. «En cambio de las fronteras hacia adentro no hay acuerdos. Mendoza no quiere llegar a ningún acuerdo con el río Atuel como tampoco quiere ningún acuerdo con el río Salado y quiere hacer una política de quedarse en lo posible con todo el río Colorado», denunció.
«En un país tiene que haber equilibrio, porque el país lo conformamos todos. No es Mendoza por un lado y La Pampa por el otro. Las obras para el aprovechamiento de los recursos tienen que ser compartidas, porque para construir justamente un país hace falta la cooperación y no la división, como pretenden los mendocinos».
Peligroso.
Gómez recordó que el organismo que regula el manejo del río Colorado, el Coirco, tiene una larga y prolífica historia. Sin embargo Mendoza concurre a sus reuniones «cuando le conviene, y cuando no le conviene no va». En este momento político, con Mendoza impulsando a toda fuerza la construcción de Portezuelo del Viento, «allí (en el Coirco) hay un problema bastante grave que es el comportamiento de dos provincias que tendrían que apoyar a La Pampa, defendiendo sus intereses también, que son Río Negro y Buenos Aires», sostuvo. «Por razones que sospechamos políticas de muy baja estofa, están apoyando a Mendoza, cuando deberían estar con La Pampa, que tiene una posición que yo considero que es correcta».
Ruta 34.
La ruta provincial 34 corre paralela al río Colorado en toda la margen pampeana pero «está en bastante mal estado», sostuvo Gómez, que aprovechó la entrevista para plantear la necesidad de una pronta reparación de ese camino. «Son 400 kilómetros que, sacando el primer tramo que es el que llega al Acueducto (del Río Colorado), en el resto es una ruta que tendría que estar por lo menos enripiada», consideró.
«Si queremos aprovechar el río Colorado desde el punto de vista de la producción, del turismo y de la comunicación entre las localidades que están sobre el río, tenemos que asfaltarla en lo posible o por lo menos tener un buen ripio para que sea fácil trasladarse», sugirió Gómez.
Una idea que aportó es destinar a éste una parte de las regalías que la Provincia cobra por su producción petrolera, tanto para este fin como para mucha otra infraestructura productiva. «La provincia recibe cerca de 3.000 millones de pesos de regalías del petróleo; si se aplicaran solo la mitad durante 10 años, a desarrollar el río Colorado, tendríamos una provincia totalmente distinta y pujante», afirmó.
«Con eso podríamos hacer no solamente las rutas, sino las obras que hacen falta, tener créditos baratos o blandos para que la gente pueda producir, y podría haber la electrificación que hace falta llevar al lado de la ruta», se entusiasmó.
Plan de desarrollo.
El presidente de la Fuchad destacó el crecimiento que exhibe la zona bajo riego pampeana y su condición de no estar tan atada a las contingencias climáticas, como ocurre en el resto de la provincia. «En la zona del río Colorado hay producciones de maíz constante, todos los años, de más de 10.000 kilos promedio por hectárea, y una producción de alfalfa de 15 toneladas de materia seca por hectárea», señaló. A ello se han sumado en los últimos años importantes plantaciones de zanahoria y cebolla.
Con las grandes producciones de alfalfa y de maíz se puede hacer ganadería intensiva, que es una producción que viene ligada al tambo. «Podés tener una cuenca lechera muy cerca de un lugar demandante como es la Patagonia», evaluó. «Tenés muchísimas posibilidades siempre que hubiera un plan de desarrollo, que es lo que lamentablemente en la Argentina no existe, porque no está la idea muy fuerte de que el país tiene que tener planes de desarrollo», concluyó.
“El ambiente tiene derechos”.
El presidente de la Fuchad consideró “fantástico” que la Corte Suprema haya señalado la sentencia del 1 de diciembre de 2017 sobre el Atuel como un caso paradigmático de defensa del ambiente. “La lucha (pampeana) hasta ahora no ha servido para devolver el Atuel, pero ha servido para defender y preservar los glaciares”, valoró.
“La argumentación (de la Corte) que toma como antecedentes la sentencia del 2017 pone en evidencia que, como dice la Ley General del Ambiente y establece la Constitución (nacional), hay una visión que pasó de ser antropocéntrica a ecocéntrica”.
“Es como si el ambiente tuviera derechos”, analizó el dirigente ambiental, coincidiendo con otras opiniones que señalan la trascendencia jurídica que tiene tanto la sentencia sobre el Atuel como el enfático respaldo a la Ley de Glaciares.
A su entender, estas decisiones de la Corte anticipan una pronta definición sobre el caudal mínimo que le corresponde a La Pampa para reconstituir el ecosistema del oeste provincial. “La Corte va a tener que asumir el papel de establecer el caudal porque ha habido muchísimas reuniones pero La Pampa y Mendoza no se pueden poner de acuerdo”, recordó. El caudal que pidió La Pampa, 4,5 metros cúbicos por segundo, “es bastante moderado y yo pienso que tendría que pedir mucho más”, aseguró. “Lo que ha ofrecido Mendoza es ridículo, y encima con una salinidad de 6 gramos por litro que va a agravar el daño ambiental, y no mejorarlo como estableció la sentencia de la Corte”.
Al cerrar la entrevista, Gómez anunció que este será su último año al frente de la Fundación Chadileuvú. “He pedido que me reemplacen; no es bueno para la Fundación tantos años. Voy a seguir estando, pero desde otro lugar”, anticipó.-
La Arena    17/06/19